Dicen que la compra de una vivienda es una de las decisiones más importantes a la que nos enfrentamos en la vida. Muchos de los que lo afirman no tienen hijos adolescentes.

Si la compra exige reflexión, la venta además de parar y pensar exige calcular. Estos tres verbos en sinfonía nos llevarán a tomar decisiones correctas.

1. Posibilidades:

• Vendemos nuestra vivienda habitual para comprar un nuevo domicilio familiar.
• Vendemos nuestra segunda vivienda.
• Vendemos nuestra vivienda habitual, somos mayores de 65 años y estamos jubilados.

En el primero de los supuestos debemos saber que el dinero obtenido por la venta debe ser reinvertido en la adquisición de la nueva vivienda en el plazo de dos años. Estos dos años actúan como una horquilla adelante y atrás, de manera que podremos comprar antes de vender y una vez transmitamos la vivienda adquirida en primer lugar destinar el precio obtenido a la reinversión en la segunda.

Si lo que vamos a vender es una propiedad en la que no tengamos nuestra residencia habitual, se ha vivido en la vivienda menos de tres años consecutivos, el fisco nos va a castigar por demostrar que somos más ricos que la mayoría. En ese caso, tendrás que tributar en tipos que en 2016 irán entre el 19 y el 23%. Además tendrás ventajas fiscales si adquiriste el inmueble que vendes antes de 31 de diciembre de 1994.

Los mayores de 65 años que transmitan su vivienda habitual estarán por regla general exentos de tributar. Repetimos, sólo su vivienda habitual. Necesariamente deberán estar jubilados y haber residido los últimos tres años en la vivienda.

2. Precio:

Procura fijar un precio justo a tu propiedad. Busca estadísticas en los portales del precio m2 en tu barrio. Corrige al alza o la baja en función de que sea reformada o no, que tenga ascensor, exterior, planta alta, etc. Todos estos factores corrigen o moderan el precio medio pero no lo sustituyen, tenlo siempre en cuenta.

3. Consejos prácticos:

Además de estas cuestiones de índole económica os voy a dar una serie de consejos que las mejores empresas inmobiliarias damos a nuestros propietarios a la hora de exhibir sus propiedades:

1. Tómate la venta de tu vivienda como un verdadero acontecimiento. Trátelo como el día de tu boda o de la comunión de tu hijo.
2. Limpia, ordena e ilumina antes de tomar fotos. Es mejor que las fotos sean tomadas por un fotógrafo profesional, será toda una garantía de éxito y le darán los retoques profesionales que necesita para que resulte atractiva al público. Sé consciente de que tu producto va a competir con cientos de inmuebles en tu mismo barrio o población. Nuestra novia tiene que ser la más guapa de todas.
3. Ten a disposición de los interesados información sin titubeos. Si la vivienda tiene una hipoteca informa al interesado de las condiciones, quizás le interese subrogarse. Ten a mano los gastos de comunidad, de IBI, de electricidad o gas, etc. Toda la información que proporciones dará a tus posibles compradores mucha tranquilidad.
4. Posiciona en los portales inmobiliarios. Sólo los inmuebles en primeras posiciones tienen interés para el público. En vivienda2 estudiamos el marketing digital teniendo en cuenta que cada candidato va a destinar a la búsqueda 15-20 minutos de media. Tienes que estar en esas dos o tres primeras parrillas de búsqueda. Las mejores inmobiliarias te lo garantizan porque invierten miles de euros mensualmente en ese posicionamiento.
5. Debes estar siempre disponible para enseñar el inmueble, incluso los fines de semana. Nunca puedes dar una visita por perdida. Nuestra experiencia nos dice que muchos clientes vienen puntualmente de otras provincias para buscar vivienda en Madrid y les atendemos casi las 24 horas del día.
6. Si no tienes disponibilidad contrata un buen profesional. Necesariamente alguien que deje tu propiedad en buen lugar.

Con estos consejos, mezcla de reflexión y de pasión, la venta de tu inmueble será necesariamente un éxito.